TRATAMIENTOS NATURALES Y CASEROS PARA LA VESÍCULA BILIAR
|La vesícula biliar es un órgano con forma de pera ubicado debajo del hígado. Almacena bilis, un líquido producido por el hígado para digerir las grasas. Cuando el estómago y el intestino digieren los alimentos, la vesícula biliar libera bilis a través de un tubo denominado conducto biliar común. Ese conducto conecta a la vesícula biliar y el hígado con el intestino delgado.

Es más probable que la vesícula cause problemas si algo obstruye el flujo de bilis a través de los conductos biliares. Eso suele ocurrir con los cálculos biliares. Los cálculos se forman cuando hay sustancias en la bilis que se endurecen. Es muy frecuente que ocurra esto con el exceso de estrógenos (mujeres que sufren dolores o problemas menstruales). Las crisis por cálculos suelen presentarse después de las comidas. Los signos de una crisis por cálculos incluyen náuseas, vómitos o dolor en el abdomen, la espalda o debajo del brazo derecho. Pero no hace falta, sin embargo, sufrir “cólicos” para tener síntomas de una vesícula “perezosa”: dolor del cuello, dolor de cabeza que inicia en ojo o sien izquierda, sensación de hormigueo en ambos brazos o manos, dolor nocturno de los brazos, dolor de hombro, y sobre todo mala digestión ante comidas muy grasas o comidas copiosas nocturnas.
El tratamiento médico depende de cada caso (cirugía, tratamiento disolutivo oral con ácidos biliares, litotricia biliar extracorpórea, tratamiento disolutivo por contacto). En cuanto al papel de la dieta, una alimentación adecuada puede colaborar en la prevención de la colelitiasis, y en personas ya afectadas, facilitar el reposo del órgano, y con ello, prevenir los síntomas agudos de cólico biliar y las dispepsias o molestias digestivas.
En este artículo, te daremos algunos Remedios caseros para los desórdenes de vesícula biliar:
• Tratamiento con remolacha, zanahoria y pepino
Zumos frescos de remolacha y los zumos de zanahoria y pepino en cantidades de 100ml cada uno, son uno de los limpiadores más finos de la vesícula biliar. Este zumo combinado ha probado ser benéfico en el tratamiento de todos los desórdenes relacionados a este órgano, y debe ser tomado dos veces al día.

• Tratamiento con peras
La pera es otro excelente remedio para los desórdenes de vesícula biliar. Esta fruta o su zumo deben ser tomados deliberadamente por el paciente con resultados benéficos. Ejercita un efecto de curación especial en todos los desórdenes de vesícula biliar, incluidos los cálculos.

• Tratamiento con achicoria
Las flores, semillas y raíces de achicoria o endivia son consideradas valiosas en los desórdenes de vesícula biliar. La decocción de alrededor de 30-60ml de las flores, semillas y raíces pueden ser usadas tres veces al día con resultados benéficos en el tratamiento de estos desórdenes. El jugo de endivia o achicoria en casi cualquier combinación promueve la secreción de bilis y es, por lo tanto, muy bueno tanto para el hígado como para las disfunciones de vesícula biliar.

• Tratamiento con diente de león
El diente de león tiene un efecto benéfico en la vesícula biliar. Aproximadamente 125ml de jugos de diente de león y berro deberían ser tomados 2 veces al día. Combinado con una dieta vegetariana, sin mucha azúcar y fécula, estos jugos ayudan a normalizar la vesícula biliar.

• Tratamiento con aceites de oliva y girasol
Una cura de aceite fue defendida por algunos practicantes de las curas naturales para remover los cálculos. Aceites vegetales de oliva o girasol, no refinadas, naturales son usadas. El procedimiento consta en tomar 30ml de aceite vegetal, preferentemente aceite de oliva, como primera cosa en la mañana y acompañarla inmediatamente con 120ml de zumo de pomelo o zumo de limón. Este tratamiento debería ser hecho cada mañana por varios días, incluso semanas, si es necesario.

Dieta para desórdenes en la vesícula biliar
Los pequeños cálculos usualmente pueden ser eliminados con una cura dietética. En casos de inflamación aguda de la vesícula biliar el paciente puede ayunar 2 días hasta que la condición aguda se vaya. Nada excepto agua debe ser tomado durante este período. Después del ayuno el paciente debe ingerir zumos de frutas y vegetales por unos días. Zanahorias, remolacha, pomelo, peras, limones o uvas pueden ser ingeridas en la forma de zumos. Además de esto la persona debe seguir una dieta equilibrada que no sea agresiva con su hígado o su vesícula: mucha verdura cocinada, algo de fruta y semillas, aceite de oliva, pescado blanco a la plancha de forma habitual. Se deben evitar carnes, huevos, grasas animales, comida procesada y desnaturalizada, comidas fritas y grasosas, carbohidratos refinados, alcohol, productos hechos con azúcar y café, así como también picantes y condimentos. Además, se debería comer frecuentemente pequeñas comidas en lugar de tres grandes comidas.
¿CÓMO COCINAR Y CONDIMENTAR?
• Preferir aquellas técnicas culinarias que menos grasa aportan a los alimentos: al agua -cocido, hervido, al vapor o escalfado-, rehogado, a la plancha, al horno y papillote.
• Evitar: fritos, rebozados, empanados, guisos y estofados.
• Para que la comida resulte más apetitosa se pueden emplear diversos condimentos:
– Ácidos: vinagre de manzana o vino, zumo de limón.
– Aliáceos: evitar los carminativos que estimulan las secreciones digestivas -ajo, cebolla, chalota, puerro- según tolerancia individual.
– Hierbas aromáticas: Ayudan a la digestión el estragón, eneldo, laurel, tomillo, romero.
– Evitar las especias fuertes: pimienta (negra, blanca, cayena y verde), pimentón, guindilla.
Y como consejos extra se recomienda:
✔Hacer diariamente ejercicio suave con la toma de mucha agua natural.
✔Evitar fumar.
✔Consumir porciones de comida más pequeñas.
✔Evitar acostarse inmediatamente después de comer.
✔Limitar alimentos grasos.
✔Limitar o mejor evitar el alcohol.
✔Relajarte en momentos de estrés con el control de respiración o yoga.