Insuficiencia cardíaca: Síntomas, causas y prevención
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El corazón es uno de los órganos más importantes en nuestro cuerpo, y es que es el encargado de bombear sangre por todo nuestro cuerpo, esta función es vital y cualquier enfermedad que dañe el corazón le impedirá realizar esta tarea eficientemente ocasionando una insuficiencia cardiaca. Hoy aprenderás a evitar sus causas y a controlar esta frecuente enfermedad crónica.
¿Qué es la insuficiencia cardiaca?
La insuficiencia cardíaca es una enfermedad crónica del corazón que no permite realizar su función de bombeo de la sangre correctamente. Prácticamente cualquier enfermedad que dañe al corazón puede desembocar en una insuficiencia cardíaca con el tiempo.
Es una enfermedad muy frecuente, 15 de cada 1000 personas la sufren en el mundo y la proporción es mayor entre los mayores de 70 años, llegando a 40 de cada 1000 enfermos. Además, la insuficiencia cardiaca es permanente, se puede controlar, pero no curar, y requiere un tratamiento efectivo, pero caro.
Síntomas
Los síntomas no suelen presentarse sino hasta varios meses o incluso años después de la causa inicial, los síntomas más importantes son:
Disnea: se conoce como disnea a la sensación de fatiga o falta de aire al realizar un ejercicio físico más o menos moderado. Es el síntoma más frecuente de la insuficiencia cardíaca y se debe al estancamiento de la sangre venosa en los pulmones, ya que el corazón no puede recibirla e impulsarla hacia el resto de cuerpo. Es además el síntoma que más incapacita a las personas que sufren insuficiencia cardíaca. Podemos dividir a la disnea en cuatro grados según su intensidad:
Grado I: disnea que aparece con esfuerzos superiores a los que se realizan habitualmente.
Grado II: disnea que aparece al realizar actividades cotidianas (caminar llevando compra, subir escaleras, etcétera).
Grado III: disnea que aparece con pequeños esfuerzos (ducharse, vestirse, afeitarse…).
Grado IV: disnea que permanece cuando se está sentado sin realizar ejercicio.
Ortopnea: se llama así a la sensación de falta de aire cuando se está tumbado en la cama. De hecho, es frecuente que los pacientes con insuficiencia cardíaca duerman con dos o más almohadas, porque al incorporarse se alivia esa sensación. El motivo es el mismo que el de la disnea: los pulmones tienen sangre estancada que no permite captar el oxígeno correctamente. A veces los enfermos pueden despertarse en mitad de la noche con sensación de ahogo y con tos, es lo que se conoce como “asma cardial” (asma producida por el corazón).
Edemas: tener los tobillos hinchados cuando se está de pie o sentado es uno de los síntomas de la insuficiencia cardíaca, aunque puede ocurrir por otros motivos. Aunque no es un síntoma que dificulte la vida al enfermo, sí que sirve para comprobar que el tratamiento está funcionando o no.
Cansancio y debilidad: además de la sensación de fatiga propia de la disnea, también es frecuente que el paciente no soporte realizar ejercicio debido a la falta de riego sanguíneo hacia sus músculos. No es tan raro encontrar que los músculos del enfermo estén atrofiados, como si no estuviese bien nutrido.
Pesadez abdominal: las personas que sufren insuficiencia cardíaca suelen saciarse muy pronto en las comidas, en seguida tienen la sensación de “estar llenos”. Esto se debe al estancamiento de la sangre venosa en los órganos abdominales, especialmente en el hígado, que puede estar agrandado e incluso desarrollar una cirrosis hepática.
Hemoptisis: es el nombre que se le da a toser sangre. Si la presión de la sangre venosa en los pulmones es muy elevada, las pequeñas venas pueden romperse y la sangre sale a los alveolos pulmonares hasta que se expulsa al exterior cuando se tose. El caso extremo sería el edema pulmonar, que constituye una situación de emergencia, ya que los pulmones están completamente encharcados de sangre y el enfermo expulsa por la boca una espuma enrojecida por la sangre.
Disfonía: las alteraciones de la voz pueden ser un síntoma secundario de la insuficiencia cardíaca. Los nervios que se encargan de movilizar a las cuerdas vocales pasan cerca del corazón y al agrandarse puede comprimirlos.
Causas
Las principales causas de la insuficiencia cardiaca son:
- Una causa inicial daña el corazón de manera que lo debilita y no se puede contraer correctamente o tiene que hacer grandes esfuerzos para hacerlo. Una vez que sucede esta causa inicial lo único que podemos hacer es retrasar la aparición de la insuficiencia cardíaca, a veces hasta varios años después.
- Varios órganos reciben menos sangre de la que necesitan.
- El cuerpo humano activa mecanismos compensadores para paliar la falta de bombeo sanguíneo. El mecanismo más importante es el sistema renina-angiotensina-aldosterona, que se activa en el riñón.
- Los mecanismos compensadores se agotan o incluso favorecen el daño del corazón debilitándolo aún más entrando en un círculo vicioso.
- El corazón entra en una situación de insuficiencia cardíaca. Es frecuente que aumente su tamaño para poder realizar el mismo trabajo que realizaba antes.
Consecuencias
Cuando la insuficiencia cardíaca no se trata se convierte en una enfermedad letal, con una mortalidad precoz y una calidad de vida nefasta. Por este motivo se le conoce como el cáncer del corazón
Prevención
La prevención se resume en evitar las causas iniciales que provocan la insuficiencia cardiaca, así que las medidas preventivas son las habituales para mantener una salud cardiovascular:
No fumar.
Realizar ejercicio físico moderado una hora al día.
Consumir alcohol con moderación.
Controlar los niveles de presión sanguínea, colesterol y glucosa.