7 Hábitos de higiene que estás haciendo mal y no lo sabías
|Si eres de aquellos que les gusta mantenerse informados en cuanto a mantener una buena higiene se trata, te traemos un conjunto de sugerencias sobre lo que NO debes hacer en tu rutina:
1. Enjuagar la pasta de dientes con agua después del cepillado
Los dentistas dicen que es mucho mejor para nuestros dientes si escupimos la pasta de dientes después de cepillarnos, porque nos ayuda a retener su mejor ingrediente: el flúor. Al enjuagar la boca, disminuimos sus efectos preventivos y, por lo tanto, somos más propensos a las caries.
2. Guardar toallas en el baño
Las toallas pueden contaminarse muy fácilmente en un baño. Por ejemplo, al descargar el inodoro con la tapa abierta, rociar aerosol, y la humedad general pueden ayudar a que las bacterias se asienten en las toallas aparentemente frescas y limpias. Recomendamos llevar tus toallas a un armario de ropa blanca afuera del baño, de lo contrario, podrías enfermarte.
3. Eliminar por completo los vellos de la nariz
Por lo general, asociamos el vello corporal con algo insalubre, pero lo cierto es que cumplen una función en cuanto a protección. Así que no hay absolutamente ningún beneficio para la salud al eliminarlo. Atrapan el polvo y otros alérgenos antes de entrar en tus pulmones, así que, a menos que los pelos sobresalgan de la nariz, déjalos en paz, y si lo hacen, cepilla ligeramente la superficie.
4. Lavarse las manos con agua caliente
Crecimos creyendo que el agua caliente combate mejor los gérmenes, pero no hay diferencia entre las temperaturas altas y bajas. El agua debe estar a unos 100 ° C para que sea una amenaza para las bacterias. Además, el agua caliente puede ser agresiva para la piel, lo que puede provocar resequedad en las manos. Simplemente lávate por un período de tiempo más largo, en lugar de usar agua más caliente.
5. Ponerte desodorante inmediatamente después de la ducha
Muchos de nosotros nos apresuramos a ponernos desodorante inmediatamente después de la ducha para prevenir instantáneamente la sudoración, pero en realidad no nos estamos haciendo ningún favor. A menos que tu piel esté perfectamente seca, el desodorante no funcionará tan bien. Sé paciente y, como resultado, estarás libre de sudor.
6. Limpiar el baño a temperatura ambiente
Te sorprenderá la diferencia en la limpieza si precalientas tu baño de antemano. Las temperaturas cálidas harán que los productos de limpieza sean más efectivos y que el fregado general sea mucho más fácil. Solo deja correr el agua caliente y espera a que la habitación se humedezca antes de lavarla.
7. Estar descalzo en la ducha (ya sea en casa o pública)
El suelo es la superficie más sucia del baño. Ahora imagina cómo es en un gimnasio o en un hotel. Nos estremecemos ante la sola idea de tocar esas baldosas incluso con un dedo del pie. Los expertos médicos advierten que puedes exponerte a innumerables infecciones, así que hazte un favor y no olvides traer calzado para la ducha si sabes que podría necesitarlo.